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Artículo: ORO 18K

ORO 18K

ORO 18K

Invertir en una pieza de 18k es apostar por un metal con valor eterno

¿Qué significa Oro 18k?

El Oro 18 quilates (18k), también conocido como Oro de ley 750, es una aleación compuesta por 75% de oro puro y 25% de otros metales (comúnmente plata y cobre), cuya función es aumentar su dureza y durabilidad.  

Pureza del Oro

La pureza del oro puede ser medida en quilates (k o kt) o en milésimas. La escala de quilates va del 1 al 24 (1/24), por lo que 24k equivale a 99.9% de oro puro. En el sistema de milésimas, el Oro 24k se conoce como Oro de ley 999 (.999/1000). 

Sin embargo, en joyería el Oro 24k no suele usarse debido a que su blandura intrínseca hace que se raye o deforme con facilidad. En contraste, el Oro 18k representa el equilibrio ideal entre pureza y resistencia, lo que lo convierte en la elección perfecta para joyería fina. 

La siguiente tabla muestra las diferencias entre distintos grados de pureza del oro utilizado en joyería.


¿Es mejor el Oro 18k o 14k?

El Oro de ley 750 es considerado un estándar de excelencia en joyería fina a nivel internacional.

Estas son algunas de las razones por las que trabajamos con Oro de ley 750:

1. Valor intrínseco del metal:  Una joya de Oro 18k, a igualdad de peso, posee mayor contenido de oro puro (75%) en comparación a una joya de 14k (58%) y, por ende, un valor intrínseco superior en el mercado internacional de metales preciosos.

2. Percepción de lujo y prestigio: El Oro 18K es considerado un estándar de excelencia, mientras que el oro 14K se asocia con joyería comercial o de producción masiva. El Oro 18K ofrece un color más intenso y cálido, percibido como noble y atractivo, lo que incrementa su apreciación estética y prestigio.

3. Conservación del valor a largo plazo: Una pieza en oro 18K mantiene mejor su capacidad de reventa o empeño, ya que contiene un mayor porcentaje de oro. En mercados donde el contenido de metal fino es decisivo (ej., tasaciones, subastas o casas de empeño), las piezas en 18K son más líquidas y cotizadas que las de 14K.

En conclusión, aunque el oro 14k es más económico y resistente por su aleación, carece de pureza y valor patrimonial, mientras que el oro 18k representa el equilibrio perfecto entre prestigio, inversión y durabilidad.

Cuidados básicos

El Oro 18k NO se oxida, pero para conservarlo en estado óptimo, recomendamos evitar la exposición a productos químicos agresivos (ej. cloro), perfumes, y agua salada. De igual forma, un adecuado mantenimiento requiere una limpieza periódica, almacenamiento individual, y mantener en un entorno seco y protegido.

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